Hoy recibimos la ceniza recordándonos qué llevamos la marca de la Vida y por tanto tenemos que procurarla y cuidarla recordando nuestra realidad finita que tiene principio y fin pero junto a la Vida está el Amor de Dios que acompaña, sostiene y fortalece nuestra vida haciendo de nuestra historia, historia de Salvación por eso después de la ceniza hemos escuchado como Él nos sigue hablando al corazón y quiere contar con nosotros empezando por los más necesitados como vamos hacer solidarizándonos con nuestros hermanos de Colombia y Venezuela a través del día de la amistad en favor de esos proyectos.