Durante la mañana de ayer celebramos en nuestro colegio y en todos los de nuestra querida Congregación, el día de nuestra Titular la Virgen del Patrocinio, realizando diferentes actividades según cada etapa escolar. Pedíamos a la Virgen su Protección y Amparo además, por supuesto de agradecer tantas cosas que la vida nos ofrece. Esta misma vida que en un cerrar y abrir de ojos te cambia.

Anoche recibimos la triste noticia de que nuestro querido alumno Alberto nos había dejado. Bajo la protección y amparo de la Virgen, vuelas al encuentro de Dios y la Vida en plenitud, liberado del dolor y la enfermedad, vive para siempre en nuestros recuerdos, en el amor compartido contigo, en tu familia, que incansablemente ha luchado junto a ti; vive también en tantas oraciones y ruegos con los que hemos querido arroparte a ti y a los tuyos.

El Dios de la Vida, querida familia, os conceda la paz y os muestre la esperanza a la que somos llamados, y que hoy ya disfruta Alberto, sonriéndonos y pidiendo por los suyos, a la vez que nos lanza sus besos y muestras de cariño arropado bajo el manto y de la mano de la Virgen del Patrocinio.

Nunca olvidaremos de Alberto su sonrisa, su alegría y su forma de ser.